Muy buenas. Ni me
acuerdo de cuando fue la última vez que escribí una historia de este tipo.
Pensándolo bien, ni sé cuando fue la última vez que escribí una historia.
Mi última carrera fue
en noviembre de 2009, y el pasado año 2012 parecía que era la fecha del
regreso, pero por unas cosas y por otras, no pudo ser, aunque faltó bastante
poco. El caso es que por poco o por mucho, no pude ponerme el casco ni una vez,
aun teniendo la licencia en la mano.
Para este nuevo año no
esperaba tener la oportunidad de hacer nada, pero por si acaso hubiera suerte,
me ofrecí a través de las redes sociales y amistades del motor a ver si alguien
necesitaba un copiloto como yo. A este respecto podemos resumir los primeros
tres meses del año diciendo que hubo posibilidad de correr todo el año, de
hacer alguna carrera suelta o de no hacer nada. A finales de marzo surge una
posibilidad bastante real de hacer el rallye de Santa Brígida con Osmundo
Ramírez en su “soplillo”, pero se queda en el aire debido al gasto que él tenía
que hacer para correr, debido a que tenía los sillones y cintos caducados. Habiendo
pasado de largo el rallye de Canarias, tenía bastante claro que le volvería a
sacar el jugo a la licencia de comisario de ruta yendo a todas las pruebas que
hace la escudería Aterura, pero como nunca se sabe lo que va a pasar y hasta el
rabo todo es toro, por las fechas del mencionado rallye del ERC recibo la
llamada de un amigo que va a hacer el campeonato insular de slaloms y quiere
contar conmigo a su derecha. A bote pronto no sé ni que contestarle, ya que las
carreras en circuitos de tierra no estaban en mi agenda ni en mi cabeza desde
la última vez que fui a una, que si no recuerdo mal fue en 2007 con Raúl
Quesada.
Dejo pasar los días de
la prueba europea y decido decir que sí a la propuesta. He de reconocer que
hasta última hora tenía la esperanza de volver a subirme al lado de Quesada en
cualquier programa que él fuera a hacer, debido a que sus circunstancias a primeros de año eran un poco raras, pero al final no se puede y si se llegara a
poder, sería algo suelto y… a lo mejor ni eso. Por tanto, decido usar el refrán
de “más vale pájaro en mano que amanece más temprano” y coger la oferta de mi
amigo Diego Guedes para hacer los cinco slaloms a bordo de un Toyota Corolla ex
Miguel Jiménez. Luego resultó que Raúl también hará los slaloms, por lo menos
el primero y posiblemente alguno más. Quien sabe si hubiera salido con él de no
tener ya cerrado el otro trato. Así es la vida.
Y mira por donde, preparando el slalom del
Pajar me escribe el amigo Osmundo para decirme que ha conseguido un dinero y
que tiene intención de salir en Santa Brígida el 13 de abril y que si quiero ir
con él, a lo que yo contesto que sí. Sobre la marcha nos ponemos a trabajar con
ese papeleo y organizar los entrenos, ya que sólo queda una semana cuando
cerramos el trato.
Para los que no lo
conozcan, Diego Guedes es un amigo de Ingenio que el año pasado hizo las
subidas de La Pasadilla
y Arucas con un Yaris. En el año 2010 compartimos seis meses de vivencias en el
barrio santacrucero de Añaza, y después de eso nunca perdimos del todo el
contacto. Compró ese coche, lo puso al día y se acordó de mí para ser su
copiloto. Lo que une "la mili".
Con eso y con
todo, nos inscribimos en la primera
carrera del año, la primera de su vida en tierra y la primera mía después de
tres años y pico, con toda la ilusión del mundo. Mi misión será hacer que Diego
lo pase bien, disfrute de su coche, lleguemos al final sin problemas de ninguna
clase y si se puede, quedar lo más arriba posible.
Por otro lado, a
Osmundo Ramírez lo conoce casi todo el mundo. Es un piloto de Santa Brígida que
ha corrido muchos años con un Renault 5 GT Turbo, normalmente con la publicidad
de Pepsi. En los últimos años no ha hecho sino algunas carreras sueltas y con
patrocinios pequeños, pero siempre quedando entre los veinte primeros de todas
las clasificaciones. Este mismo año hizo la recuperada subida a Juncalillo
cuajando una notable actuación. El objetivo con él será divertirnos y disfrutar de la experiencia de ir en un coche con turbo con un piloto rápido, que hace años que no sé lo que es eso.
Pues así se presenta
este inicio de 2013, de estar dos años parado total y entrenar algo en 2012 para casi correr pero no,
a tener un programa cerrado para los slaloms, quizás el rallye de tierra y el
Santa Brígida en asfalto, como mínimo.
Espero ir contando
cosas buenas y entretenidas, para mí al vivirlas y para ustedes al leerlas.
Desde ya aprovecho
para dar las gracias a Diego por acordarse de mí, y a Edu González y Pedro
Domínguez que primero uno y luego el otro me pusieron en contacto con Osmundo,
al que también debo agradecimiento.
Mi familia y mi mujer
tienen también mucho que ver en que el año empiece así de ilusionante aun sin
haber corrido. Sin ell@s no sería feliz ni buscaría estos complementos como son
las carreras para seguir siéndolo.
Próximo capítulo, la
crónica del slalom Bahía del Pajar, a celebrarse el domingo 7 de abril. Espero
que me de tiempo de escribirlo antes del segundo, que será el sábado 13 del
mismo mes con la celebración de la prueba satauteña.
Sólo una cosa más:
sonríe, te irá bien.
![]() |
Toyota Corolla de Diego, corriendo con su anterior dueño. (foto Motor2000) |
![]() |
R5 GT Turbo de Osmundo (foto Motor2000) |