jueves, 28 de mayo de 2015

Previa del Gran Canaria 2015. Buscando la venganza.

Un mes y algo más tarde de la última vez que nos sentábamos a escribir volvemos a las andadas, ahora para resumirte los preparativos de nuestra participación en la edición número 54 del rallye Isla de Gran Canaria, que para mi será la segunda vez que me acoja, siendo la primera en 2005 junto a Miguel Quintino cuando se pasaba por aquel tramo en Sardina de Gáldar que nunca más se repitió y la salida y llegada eran en La Ballena.

Volviendo al 2015, después de la avería sufrida en el “Corte Inglés” no cabía duda alguna de que tendríamos que estar en la salida del siguiente, ya que si queremos aspirar a algo en algún campeonato las posibilidades pasan por correr y terminar todo lo que queda. A correr iremos, terminarlo no sabemos, pero esperamos que sí.
El coche se ha revisado a fondo, sobre todo en la zona de palieres y se ha seguido estudiando el comportamiento de la nueva suspensión.
Como siempre solemos hacer, hemos ido poco a reconocer. Al decir poco me refiero a que no les hemos dado 15 o 20 pasadas a los tramos, ya que ese no es nuestro estilo, ni tenemos tiempo para ello. Las notas están bien hechas, son tramos bonitos y revirados en gran parte (lo que en teoría le viene bien al Clio), por lo que la sensaciones son más que buenas. En el tramo 1 hay una zona que tiene unos conos y unas vallas de obra en medio de la carretera, y allí han estado todas las veces que fuimos, por lo que han quedado apuntadas en las notas y ya se verá. Vale más eso que olvidarlas y encontrarlas a todo trapo con el coche de carreras. En esa misma zona, impresiona bastante pasar al lado mismo de las presas, dando la sensación en algún momento que estamos caminando por encima del agua. 
Entrenando sobre el agua

El rallye es repetido al del año pasado, pero nuevo para nosotros ya que ninguno de los dos ha corrido nunca ni por el tramo de Las Presas (por lo menos en ese sentido y distancia) ni por el de Tejeda. La supresión del tramo espectáculo del viernes por la tarde supone un alivio sobre todo a nivel horario. Ahora se hacen las cosas como en otra carrera, verificar, ceremonia y a casa, todo en la tarde del viernes. Cierto es que de manera publicitaria puede ser que un tramo de ese estilo sea rentable, pero a los corredores normalmente no nos hace mucha gracia, por lo menos a mi.  

En cuanto a mi preparación se refiere, he de reconocer que apenas he hecho deporte en el último mes. No he encontrado el tiempo libre necesario para emplearlo en eso, ni tampoco lo he buscado. Es por eso que físicamente no sé como estaré, pero moralmente estoy a tope porque quiero que este rallye sea una especie de venganza del anterior, y no sólo por el abandono sino porque no lo pasé del todo bien. He llegado a la conclusión, o más bien me he vuelto a acordar, de que hay que intentar tener toda la calidad de vida posible dentro del habitáculo. Me refiero a que hay que ir cómodo, no sólo en la postura sino en todo, con las cosas al alcance de las manos, sin tener que hacer malabarismos para entrar o salir del coche o para buscar algo dentro de la mochila que va junto a mis pies. Cierto es que esas comodidades se van encontrando también al cabo del tiempo y que yo llevo poco subido al Clio, pero hay que intentar que ese bienestar se obtenga ya. Recuerdo cuando me subí el R5 GT Turbo del amigo Osmundo y parecía que estaba en el sillón de mi salón, misma percepción que tenía en el 206 de Quesada después de un porrón de carreras en él.
Es por esto que voy a cambiar de mochila poniendo una que es más dura y sin cremalleras que se abran hasta donde no las alcanzo. Quiero poner también una riñonera aparte para las carteras y los móviles. Debo ajustarme los arneses correctamente y no a lo loco como hice para el Corte Inglés. Con todo eso espero conseguir esa comodidad que busco, y que seguro que también repercute en una mejor concentración a la hora de cantar notas.

Como curiosidad decirte que voy a estrenar sotocasco, calcetines y botas, todo regalos del cumple. Además voy a llevar un mono azul que tengo hace años y que no uso desde 2009.

Nada más. Vamos con ganas y confianza, tenemos intención de divertirnos todo lo posible y si las circunstancias lo permiten pelear por el podium de la categoría 2 y de la Maxi Rallycar Challenge.

Suerte a todos los participantes, gracias a nuestras familias y patrocinadores y a la afición que lo vive desde las cunetas con la misma pasión que nosotros desde dentro. Por cierto, salimos con el 8 en las puertas, el número de la fortuna en China. Mi afilador de lápices lo compré en el chino. Suerte asegurada. 

PD. Te pongo el enlace al comunicado de prensa.


http://www.motorenlinea.es/articulo.php?id=7697